Imagina adentrarte en un baile con una atmosfera de intriga y misterio donde los asistentes llevan una mascara que oculta su identidad.
Donde el aroma de las delicias culinarias recién preparadas impregna el aire, tentando a los invitados a disfrutar de un banquete exquisito. Las risas y los susurros se entrelazan con el sonido de los tacones golpeando suavemente el suelo mientras los asistentes danzan al compás de la música, deslizándose por la pista de baile.
Las máscaras añaden un aura enigmática permitiendo que los presentes se sumerjan en una experiencia de anonimato, donde la verdadera identidad queda envuelta en secretos: ¿Quién es quién?
En esta mascarada no importa si eres un vampiro, un brujo, un demonio, un angel, un hombre lobo o un cazador.