Consejo de la Juventud del Principado de Asturias. Conseyu de la mocedá del Principáu d' Asturies 

OVIEDO, 30/03/05.- Para el Conseyu de la Mocedá del Principáu d"Asturies (CMPA) la pérdida de más de la mitad del alumnado de la escuela rural en los últimos ocho años es tan sólo la punta del iceberg. Según el organismo autónomo la realidad de la zona rural asturiana es "tan preocupante como desalentadora". Rebeca Rodríguez, presidenta del CMPA, recordó que el Informe "Juventud y Asociacionismo en el Medio Rural Asturiano" (elaborado por el Conseyu de la Mocedá del Principáu) indicaba que "muchos jóvenes, pese a protagonizar una tendencia migratoria hacia las ciudades, manifiestan claramente su voluntad de quedarse en sus pueblos con dos hipótesis: mejorar la calidad de vida y acabar con el asilamiento de sus pueblos. El sentimiento de abandono que experimenta la población de estas zonas tiene su origen en su propia experiencia de los últimos años, carente de políticas capaces de mejorar sus condiciones de vida". Para el Conseyu de la Mocedá del Principáu d"Asturies "es perfectamente posible cambiar esta tendencia. Es más, no podemos permanecer con los brazos cruzados, hay que garantizar una adecuada inversión pública para poner fin al abandono secular de la Asturias rural".

Rebeca Rodríguez explicó algunas de las líneas centrales que deberían caracterizar una "política singular y ambiciosa" para la Asturias rural:

DIVERSIFICACIÓN EMPRESARIAL. CREACIÓN DE EMPLEO.
Uno de los aspectos básicos debe ser la creación de empleo. El Conseyu de la Mocedá reivindica una mayor apuesta por la pequeña empresa y el apoyo a la iniciativa familiar para crear mayor tejido económico. No sólo son necesarias ayudas públicas, también requiere la existencia de Equipos de Desarrollo Rural que trabajen "mano a mano" con la población, ofreciendo asesoramiento para impulsar estas iniciativas de tal forma que sean las propias personas de estas zonas las protagonistas del cambio. La desigual situación laboral de la mujer (según los datos del Informe del CMPA) requiere una atención específica para este colectivo.

INVERSIÓN EN INFRAESTRUCTURAS. MÁS EQUIPAMIENTOS PÚBLICOS.
Mejorar la calidad de vida, con una comunicaciones que reduzcan distancias y unos servicios públicos adecuados, puede ser el secreto del éxito. Para ello es necesario reforzar el "papel redistributivo" de la Administración, que debe garantizar una "inversión más ambiciosa" en esta área. Mejorar la atención a la población rural (mayoritariamente envejecida), reforzar la red sanitaria y educativa, incrementar la actividad social y cultural o generar espacios públicos de participación para la población forman parte de las medidas que reclama el Conseyu de la Mocedá del Principáu d"Asturies.

APUESTA POR LA VIVIENDA. REHABILITACIÓN COMO INSTRUMENTO DE ACCIÓN.
Sin vivienda asequible no se frenará la despoblación. Aquí la rehabilitación de vivienda abandonada constituye una herramienta fundamental. El CMPA propone un programa específico mediante la puesta en marcha de iniciativas que combinen empleo y formación, como las Escuelas Taller o los Talleres de Empleo, de tal forma que al mismo tiempo que se rehabilita vivienda se ofrezca formación para el empleo. De esta forma, mediante la acción conjunta de Ayuntamientos y Gobierno regional se podría crear un Parque Público de Vivienda que constituiría una poderosa herramienta para combatir la despoblación.

GARANTIZAR EL FUTURO. LA JUVENTUD COMO ASPECTO CENTRAL DE LA APUESTA POLÍTICA.
El envejecimiento de la población rural es una realidad incuestionable, por ello resulta imprescindible situar a la juventud como elemento central de la acción de gobierno. Rebeca Rodríguez señaló que resulta inconcebible que desde el Instituto Asturiano de la Juventud no se haya puesto en marcha una política específica, coordinando la acción del Gobierno y poniendo en marcha medidas que contribuyan a reforzar el papel de la juventud en estas zonas. Entre las medidas que reclama el CMPA se encuentra un plan para construir centros polivalentes de juventud (espacios que permitan la participación y el desarrollo de iniciativas juveniles, constituyéndose como motores de dinamización sociocultural de estos territorios), la creación de ayudas específicas para el fomento del asociacionismo juvenil en el área rural o el incremento del número de técnicos de juventud que existen en estas zonas para impulsar acciones y gestionar estas políticas.


La presidenta del Conseyu de la Mocedá del Principáu d"Asturies recordó que el Gobierno tiene en sus manos la posibilidad de garantizar inversiones y medios suficientes para responder a las necesidades de la juventud de las zonas rurales, "tan sólo es necesario compromiso político y voluntad de acabar con un abandono histórico".